- 4 chiles anchos
- 2 chiles mulatos
- 2 chiles pasilla
- 2 chiles chipotle secos
- 1/2 taza de almendras
- 1/4 taza de cacahuetes (maní)
- 1/4 taza de sésamo (ajonjolí)
- 1/4 taza de pasas
- 1/4 taza de tortillas de maíz desmenuzadas
- 1 cebolla grande, picada
- 4 dientes de ajo, picados
- 3 tomates, asados y pelados
- 1 tabletas de chocolate de mesa (preferiblemente chocolate mexicano)
- 1 ramita de canela
- 4 clavos de olor
- 1 pizca de comino
- 1 pizca de orégano
- Sal al gusto
- 1 pollo entero cortado en piezas o 1 kg de carne de pollo
- Aceite vegetal
- Caldo de pollo o agua
Instrucciones:
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Comienza limpiando los chiles, retirando las semillas y las venas. Tuesta ligeramente los chiles en un sartén caliente durante unos minutos.
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En una sartén aparte, tuesta las almendras, cacahuetes y ajonjolí hasta que estén ligeramente dorados. Luego, tuesta las tortillas de maíz desmenuzadas hasta que estén crujientes pero no quemadas.
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En una olla grande, calienta un poco de aceite vegetal y sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén transparentes. Agrega los chiles tostados, los tomates asados y pelados, las almendras, cacahuetes, ajonjolí, pasas, tortillas de maíz, canela, clavos de olor, comino, orégano y una pizca de sal. Cocina por unos minutos más para que los sabores se mezclen.
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Agrega suficiente caldo de pollo o agua para cubrir todos los ingredientes en la olla. Deja que hierva y luego reduce el fuego. Cocina a fuego lento durante al menos 30 minutos o hasta que los chiles estén suaves y los sabores se hayan mezclado.
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Retira la olla del fuego y deja que la mezcla se enfríe un poco. Luego, licúa todo hasta obtener una salsa suave y espesa. Si es necesario, puedes agregar un poco más de caldo de pollo o agua para obtener la consistencia deseada.
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Regresa la salsa a la olla y agrega el chocolate de mesa. Cocina a fuego lento, revolviendo constantemente, hasta que el chocolate se derrita por completo y la salsa adquiera una consistencia densa y brillante.
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En otra sartén, dora las piezas de pollo con un poco de aceite hasta que estén cocidas por completo. Si prefieres, también puedes usar carne de pollo ya cocida.
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Agrega el pollo a la salsa de mole y cocina a fuego lento durante unos 15-20 minutos más para que los sabores se integren.
Sirve el mole poblano caliente acompañado de arroz blanco y tortillas de maíz calientes. ¡Buen provecho!